Ocotlán, Jalisco.
Enviados especiales
Una delegación especial de BSM se encuentra en México invesitgando todo lo concerniente al deporte. El viaje nos llevó hasta Ocotlán, Jalisco, muy cerca de Guadalajara. Nos fueron a buscar al aeropuerto de Guadalajara, y allí, conversando con el conductor, salió el tema del futbol (así, sin tilde, como se dice acá). Enseguida nos confesó que era amigo de Jonny Magallón, defensor, reciente incorporación de Lanús, jugador nacido en Ocotlán y que militó en las filas de las Chivas de Guadalajara. Ante nuestro interés, el conductor hizo la propuesta difícil de rechazar:
— Si quieres puedo llevarte a la casa de Jonny a que conozcas a la madre. Quieres?
— Obvio!
Así, recién llegados a México, en vez de dirigirnos al hotel, con valijas y todo, nos fuimos a la casa de los Magallón, quienes nos recibieron de forma muy cariñosa como todos los mexicanos. Somos el primer y único medio argentino que tuvo acceso a esta casa. Estuvimos charlando una hora con su madre, le hicimos una entrevista y conocimos su historia.
Los Magallón fundaron un equipo de fútbol en Ocotlán con el principal objetivo de mantener entretenidos a la gran cantidad de niños varones que forman parte de la familia. Eso hizo que algunos, como Jonny llegaran a primera división. De Ocotlán también salieron otros reconocidos jugadores como Ismael Iñiguez y Carlos Salcido.
La madre de Jonny nos cuenta que está contenta de que esté en Argentina, pero que lo extraña, y que es difícil la distancia. Nos confiesa que Jonny está muy a gusto, y que ya ha encontrado otros mexicanos con los que compartir chiles y tortillas.
La historia de Jonny, nos cuenta su madre, tiene una particularidad. Ella vivió su embarazo prácticamente postrada y los médicos le auguraban que el niño no nacería, o que nacería con problemas físicos irreversibles. Bien a lo mexicano, la madre no lo dudó: «Pus me lo aviento!» Consultó a personas de su confianza hasta que le dieron la receta que lo salvaría: debía comer mariscos todos los días. Así lo hizo y hoy Jonny no solo no tiene problemas físicos, sino que es un atleta de alto rendimiento. Y algo más: es fanático de comer mariscos.
Nos presentan a hermanos más chicos de Jonny, muchos de los cuales están haciendo sus primeras armas en el futbol. Así que pronto quizás escuchemos de ellos. Por ahora, a estar atentos con este muchacho que da sus primeros pasos en Lanús, en un fútbol donde no muchos mexicanos han logrado estar. Nos retiramos buscando nuevos rumbos: quizás el hotel, una ducha y apoyar las valijas llenas de ilusiones. Atrás, queda la casa de los Magallón, con la puerta siempre abierta, esperando al próximo visitante que quiera saber de sus historias.
Un lujo, y muy emocionante. Que linda la hospitalidad de los mexicanos!