Esta semana, las imágenes llovieron de todos lados del mundo. Misterios revelados. Amor. Guerra. Boludos haciendo cosas. Injusticias. Justicias. Pasó de todo.
Si yo fuera José Pulitzer, le doy el premio 2014 a esta foto que muestra un objeto que hasta ahora nadie había visto: la bocha del hockey sobre hielo.
Tremendo documento del momento en que en el pasado, el padre de los mellizos Barros Schelotto no consigue invitar a la chica que le gusta al baile de graduación y eso trae como consecuencias la desaparición de Gustavo. El evento explicaria por qué Guillermo siempre se comporta como un hijo único.
La estrategia de Delpo de darle la espalda al equipo argentino de la Davis para ser numero uno del equipo de sí mismo sigue dando sus frutos secos. Perdió con Gulbis. ¡Con Gulbis!
En la subsección «Aguante la vida sin photoshop»: Drogba tomando mate, un éxitto del embajador rioplatense Muslera. Ojalá que nunca lea lo que Martin Fierro pensaría de una escena así.
Y mientras Delpo perdía con Gulbis (¡Con Gulbis!), en Buenos Aires, Ferrer ganaba la Copa Claro (nombrada así en honor a que estaba claro que Nadal no venía). Pero … epa! ganador en todos las canchas, David!
¿Y ésta quién es? ¿Acá tambien ponen minas en culo como en Olé? No, no no: esta adorable jovencita es Simona de Silvestro y está a punto de ser la primera mujer piloto de Formula 1 (parece que declaró : «si corrió Tuero, por qué yo no?»)
Mientras Ferrer se preparaba para ganar el torneo y besar una novia; y mientras Delpo perdía con Gulbis (sic), el genio de Giraldo caminó los metros que separaban el Lawn Tenis del Hipodromo de Palermo y se fue a visitar los equinos. Para qué llevó la raqueta es algo que todavía nos estamos preguntando.
Los guantes del Luger tienen pinches. Usted lo sabía? Desde cuando? Le gustaria que se lo pasen por la espalda? Miren si se los pasan por el…. (el tono de estos epígrafes se está volviendo un homenaje a Darío Víttori)
Mujeres que amablemente piden que Pistorius se pudra en la carcel. Lamentablemente sus prótesis no podrán cumplir esa condena. Injustica.
Ya leyeron todos los tuits estúpidos sobre esto. Seguramente apareció en los noticieros y no se animaron a decir «un perro cagó en la cancha». Ahora, seamos sinceros, no saben echar un perro y uno pretende que jueguen lindo?
Yuzuru Hanyu se cayó dos veces pero terminó ganando la medalla dorada. La foto representa el instante en que está por disparar la bola de fuego hacia el jurado.