El primero de los partidos de la segunda fecha del Grupo F, prometía un interesante choque entre una Bélgica candidata a priori, pero que en la presentación dejó mucho que desear y ganó de pedo contra Canadá; y Marruecos que por momentos le impuso condiciones a la Croacia subcampeona del Mundo y Campeona del Mundo No Oficial, hasta finalmente dividir puntos.
Pero la atención se vería en un principio enfocada más que al fútbol de los equipos, a un jugador en particular. Formaciones confirmadas tras la entrada en calor. Salen ambos equipos. Himnos. Fotos de los equipos. Y arranca el partido. Marruecos lleva el comando de las acciones los primeros minutos hasta que una contra croata obliga la intervención del arquero marroquí que la manda al córner. Pará pará pará. El 12 está atajando? Pregunto a los otros BSM. Es Bono, me dice Fran, por la cara. Mmm yo le vi la cara en la atajada y no parecía el de U2. Voy a promiedos, veo las formaciones y dice que ataja Bono con el 1; pero justo viene el centro y enfocan al 12. Los relatores nombran a Bono un par de veces hasta que se dan cuenta que es Munir; las redes arden. Muestran la imagen de Bono formado en el himno, y después a Munir llegando para la foto del equipo pre partido. ¿ Se lesionó?¿Tuvo que ir a hacer un trámite? (No creo. Es Domingo) ¿Se cagó?
Los que no se cagaron de ninguna manera fueron sus compañeros, que hicieron un partidazo, Boufal y Ziyec arriba la descosieron ante una Bélgica avasallada, sin reacción. Ni siquiera con los cambios (entraron Mertens, Lukaku, Tielemans y hasta Trossard para partir al medio al escurridizo Ziyec) pudieron torcer el destino. Marruecos ya había avisado al final del primer tiempo con un tiro libre centro-arco y la vieja estrategia de ir pero no tocarla que dejó despatarrado al gigante Courtois. Pero esa vez no calibraron bien y el autor del gol pasivo partió adelantado a realizar su jugarreta. No obstante, habiendo comprobado que Courtois bastante despistado quedaba con el engaño, en el segundo tiempo Sabiri recién ingresado, lo volvió a intentar casi sin ángulo y desde el otro lado. Esta vez casi no había forma de estar en offside y el goleador tácito amagó a empujarla con la pija, Por suerte no estaba erecto, y esta aparición fantasmal volviò a dejar revolcado al uno belga (que en consecuencia tampoco estaba erecto, ni en condición de arquero ni de belga). El arquerito Munir sacó las que tenía que sacar, y Ziyec armó un jugadón con centro atrás incluído para el segundo de Marruecos que acaricia la clasificación. Bélgica jugará mano a mano con Croacia a ver cual es el grande del grupo que se queda afuera.