Uno de los tantos mitos del fútbol dice que los marcadores de punta deben pasar al ataque de a uno, es decir nunca los dos al mismo tiempo. Brasil, el país de los marcadores de punta por excelencia, una vez más, rompe con los mitos. En el partido de esta semana en que Flamengo visitó a Lanús por la Copa Libertadores, el equipo de Ronaldinho se puso 1 a 0 con un gol que nace en el desborde del número 6 (lo que sería nuestro 3) y un centro que empuja a la red el número 2 (nuestro 4). Una perlita que es destacada por el comentarista Diego Latorre, quien no se detiene en la pifia del defensor de Lanús, como haría un periodista promedio.