Holanda ya está en cuartos. La naranja ganó otra vez sin despeinarse mostrándose compacto y con un buen funcionamiento colectivo, pero sólo de a ratos ya que por momentos sus partidos generan que uno los vea entre sueños o con una atención flotante debido al aburrimiento que producen. A primera vista, todos sus jugadores juegan bien, sobre todo cuando se conectan grupalmente o en el «mano a mano». Pero la verdad es que tienen una pinta de témpanos humanos que les podría valer el mote de «El Perito Moreno Mecánico». Veremos cuando jueguen contra alguien ya que este rejunte de pelados neonazis de Eslovaquia no le hizo mucho partido. Así y todo, el equipo de Enzo Trossero tuvo dos claras para empatar el partido a cargo del mismo pelado (Vittek Thoné) que volvió loco a Cannavaro (qué pensarán los tanos al ver por tele el partido?).
En definitiva, el equipo de Escroto, Salata, Estraba, Cuca, «cinta» Scotch, Penes, Durica, Mucha, Kojak y otros nombres por el estilo, llegó hasta donde pudo. Para destacar, la vuelta de Robben, el único que parece tener un poco de sangre en las venas, a diferencia de los «vende humo» de Schneijder o Van Persie. Sobre el final, casi como cábala, entraron nuevamente «calesita» Elia y Afellatio. Habrá que ver Brasil-Holanda en cuartos, puede ser partidazo.