Desde una especie de Teletubbie negro hasta Mandela en video, la ceremonia fue previsible pero corta. Nada que ver con las mil horas de los 5 muñecos del ’98 (típica pretenciosidad inútil de los franceses).
Si uno piensa en «Afrika», aparecen colores, gente saltando, plumas, semi desnudez, pinturas, corridas, una cebra perseguida por leopardos, elefantes que van a morir a un lugar alejado, marasmo, disentería, Blatter en una suite 7 estrellas, Vampire Weekend, Shaka Zulu, Fela Kuti, Coetzee, Boers, Diamantes, Daktari, Safari, Dave Eggers, Bambaataa, Public Enemy, desiertos con víboras, sabana, Ray Bradbury, Apartaheid, Steve Wonder y Michael Jackson, Afrikaans, Rugby , y Gary Player.
Lo que nunca se me había ocurrido era que Kafka tenía una raiz (sud)africana. Y fue lo mejor de la ceremonia.